De entre todas las tonterías que se escuchan de la religión islámica (una de las más ridículas de todas las que hay), hay una que últimamente me ha sorprendido: "Los talibanes advierten a los afganos de que poseer teléfonos nuevos es contrario a la ley islámica".
Pero la subnormalidad continúa: "Quien tenga un teléfono con cámara no debe tomar imágenes de mujeres con las que no se tiene parentesco y niños guapos en sus teléfonos, que es algo que va contra la ley islámica", señalaron en una carta. "La población debería pensar en la dignidad afgana en lugar de en comprar teléfonos relucientes".
Los teléfonos móviles no deberían tener "vídeos inmorales", tonos de llamada con versos del Corán, o mensajes despectivos contra individuos o tribus. Tales ofensas fueron consideradas "un delito grave" que sería castigado severamente.
Hay que tener mucho cuidado en qué religión decides profesar, como te guste la tecnología, mal el islam; si tu gusta el guarreo sin querer descendencia, mal el cristianismo; si te gusta la juerga, muy mal ser musulman; si no quieres ser un abejorro cuando mueras, mal el budismo.
Lo mejor es la libertad de pensamiento, y no vivir en una prisión.
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