martes, 8 de septiembre de 2009

JÓVENES CONSERVADORES


Recuerdo, que cuando yo estudiaba en el colegio, afortunadamente no hace tanto tiempo, me consideraba un chico de derechas, del Partido Popular. Claro, eran los últimos años de Felipe González, en mi casa mis padres eran del PP, estudiaba en un colegio Franciscano y vestía siempre camisa, jersey y pantalón de pinza. Jamás me arrepentiré de haber ido a aquél colegio.

Cuando le preguntaba a mis padres por las diferencias entre ambos partidos, ellos me decían: los del PP son cristianos, y los del PSOE no. Entonces lo tenía claro yo debía ser del PP, yo era conservador.

Recuerdo una clase, en la que uno de mis profesores nos dijo, a la temprana edad de 15 años, que cuando pudiésemos votar, debíamos hacerlo a la derecha, ya que la izquierda no haría nada por nosotros. Evidentemente ya no lo podía tener más claro. Realmente era cristalino.

Pero un par de años siguientes, me obligaron a estudiar una asignatura llamada Historia de la Filosofía. Empezamos con Aristóteles, Kant, Marx, Nietzsche, ... Las ideas de izquierdas entraron en mi mente y se comparaban con las conservadoras.

Mi mundo se hundía, ¿cómo voy a ir yo a casa y decirles a mis padres, que según lo que leía y estudiaba últimamente, mis ideales eran más de izquierdas? Joder, podría decirse que creía en el Comunismo. ¡Todo era tan hermoso en la izquierda y tan oscuro en la derecha!

Desde entonces no puedo entender y jamás comprenderé cómo una persona joven puede ser conservadora. Pero claro, qué ideas básicas tienen los conservadores:

De primeras el propio nombre ‘ Conservador’ da un pelín de miedo. ¿Qué significa? Que no les gustan los cambios. Una persona joven solo piensa en evolucionar, es por definición un ser cambiante, inconformista. Yo no puedo tenerle miedo a los cambios. Los deseo.

De segundas está la religión, un tema muy complejo. Se puede ser creyente, pero ¿cuánta gente joven sale de misa los domingos? La gente joven de hoy en día cree porque de pequeños nos metieron mucho miedo con el tema ese del Infierno. Yo me considero ateo, y aún así sigo teniendo ese pequeño temor, que no consigo quitarme de encima. Lo cierto, es que los curas lo hicieron muy bien en mi colegio.

Luego está el asunto de las tradiciones. Y las tradiciones, son retrasos en la sociedad y evolución de las personas. Son costumbres, y una persona que se acostumbra a algo es que tiene miedo a las cosas nuevas. Y eso es ser conservador.

Por último está la economía, la obsesión por la propiedad privada, y sobre todo por el dinero. El dinero es lo más importante, y si está en la hucha mucho mejor. Viva el capitalismo, que tanto hace por los ricos y tan poco por los pobres.

Últimamente se habla mucho sobre estos dos ideales. Parecemos empeñados en dividirnos, insultarnos mutuamente por lo que creemos o pensamos. Yo por ser progre me llaman Rojo, y con mucha honra, porque por esa regla de tres, un conservador debe ser un facha. Y no quiero ser un facha. Creo en el hombre como un ser que puede pensar por sí mismo y no que tenga que pensar lo que otros le dicen. Creo que todos tenemos derecho a conocer todas las opciones y no las que la religión nos dicte. Creo que todos podemos vivir juntos en el mismo sitio y llevarnos bien. Creo que todos somos iguales y que tenemos los mismos derechos. Y no creo que por ser de un barrio, una comunidad o un país, soy mejor que otro. Y jamás pensaré que por tener más dinero que otro, tengo más derechos. Por eso soy progresista, comunista, rojo, como queráis.

Yo ahora os animo a todos a que busquéis información sobre el Progresismo. Y si eres un joven conservador que me puedas explicar qué ideales tienes en común con ellos.

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